¿Qué pasa si me niego a un cambio de puesto de trabajo?

Cuando comenzamos a laborar en una empresa, somos asignados a un lugar específico. Sin embargo, algunos movimientos de la empresa pueden llevarnos a cambiar de lugar. Esto hace que muchos se pregunten ¿Qué pasa si me niego a un cambio de puesto de trabajo?

En estos tiempos tan convulsionados derivados de la Pandemia de la Covid-19. Muchas empresas han tenido que mover a sus trabajadores de lugar de trabajo. Una situación que no a muchos les agrada.

Pensando en ti, hemos decidido hacer este artículo para aclarar todas las dudas referentes a los cambios de puestos de trabajo y a una condición muy popular ahorita que es la movilidad funcional.

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¿Es posible negarse a un cambio de puesto de trabajo?

Si estamos hablando de un cambio de puesto de trabajo sustentado con buenas razones, no te puedes negar. Debes tomar en consideración que esto no siempre es una mala noticia, menos si se trata de un movimiento ascendente.

Si nos referimos a un movimiento descendente, es muy importante que sepas que pese a la degradación en el puesto de trabajo, no pueden bajarte el salario

¿Qué es la movilidad funcional?

A raíz de la Pandemia de la Covid-19, muchos empresarios se han visto en la necesidad de recurrir a la Movilidad Funcional. Esto no es más que cambiar a un trabajador de lugar de trabajo para que ejerza otras funciones diferentes a las del comienzo de la relación laboral.

Es importante mencionar que la Movilidad Funcional puede derivarse de una orden directa del dueño de la empresa y la misma estará dentro del marco de lo legal. Eso sí, siempre y cuando sea justificado y debidamente notificado.

Tipos de movilidad funcional

Ahora bien, la movilidad funcional se pone en marcha dependiendo de las necesidades de la empresa y también de las destrezas y cantidad de trabajadores que posee. Esto con el fin de optimizar al máximo el rendimiento de la compañía.

Son muchos los movimientos que se pueden dar dentro de una compañía. Esto propicia que existan diversos tipos de movilidad funcional, a continuación te diremos en que consiste cada uno de ellos:

Dentro del grupo profesional

Este suele ser uno de los movimientos más comunes y consiste en un cambio en las labores que ejerce un trabajador dentro de la compañía. Este cambio siempre deberá respetar al trabajador.

El objetivo de este tipo de cambio se sustenta en la capacidad de cada trabajador de ejercer diferentes funciones dentro de su ámbito laboral. Por otro lado, esta movilidad funcional busca no alterar tanto el esquema de la compañía.

Fuera del grupo profesional

Este movimiento busca que el trabajador realice actividades que podrían estar por encima o bien por debajo de su puesto de trabajo. Se conoce comúnmente como un ascenso o un descenso respectivamente.

Este movimiento debe ser justificado tanto por cuestiones técnicas como de organización, además deberá ser por poco tiempo. En caso de tratarse de un descenso, el trabajador no puede sufrir una reducción de sueldo.

¿Qué pasa con la relación laboral si no acepto la movilidad funcional?

A muchos no nos gustan los cambios, menos si son en nuestro lugar de trabajo. Sin embargo, dentro del esquema de la compañía, muchas veces son necesarios para mejorar la productividad.

Ahora bien, podrías preguntarte ¿Qué pasa con la relación laboral si no acepto la movilidad funcional? En términos simples, no se puede romper si el movimiento se hace de forma justificada.

Si la empresa cumple con todo el procedimiento apegado a las leyes y se lleva a cabo la movilidad funcional, el trabajador no tiene motivos justificados para romper la relación laboral.

En caso de romper la relación laboral, el trabajador tendrá un estatus de baja voluntaria. Esto se traduce en que no recibirá ninguna indemnización y además, no podrá ejercer su derecho sobre algunas ayudas sociales por desempleo.

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